La llamada feminista a la guerra

| Por: Gearóid Ó Loingsigh |

 

Se solía asociar el feminismo con movimientos pacifistas, anti-bélicas pero los tiempos han cambiado. Y ahora hay feministas pidiendo guerra, mientras siguen culpando a los hombres por todas las guerras. La contradicción es enorme. Desde hace dos años Gaza vive un asedio y un genocidio, apoyado por algunos sectores del feminismo y en medio del conflicto con Irán, surgen de nuevo voces feministas clamando por la guerra. La razón es su supuesto afán por liberar a las mujeres de Irán.

 

Cuatro presas políticas en la cárcel de Evin, Teherán (antes del bombardeo de la cárcel por Israel), conscientes del cinismo de sectores feministas en el occidente emitieron un comunicado denunciando la guerra y quienes lo apoyan. Dijeron que Israel quiere un Oriente Medio sumiso y débil y apostaron por seguir su propia lucha contra el gobierno de Teherán sin aliarse con el imperialismo yanqui.

 

Nuestra liberación... de la dictadura que gobierna el país es posible mediante la lucha de las masas y recurriendo a las fuerzas sociales, no aferrándonos a potencias extranjeras ni poniendo esperanzas en ellas.

Las potencias que siempre han traído destrucción a los países de la región mediante la explotación y la colonización, incitando guerras y asesinatos en busca de mayores beneficios, no tendrán otra salida que una nueva destrucción y explotación.[1]

 

Las cuatro mujeres son pro kurdas y también mujeres detenidas en las protestas luego de la muerte de Masha Amini a manos de la Policía de la Moralidad en 2022. Una de ellas luchó contra ISIS en Siria. No son feministas de café. Tildaron de traidores a los iraníes que pidieron guerra, entre ellos el hijo del déspota, Mohammad Reza Pahlaví, el Shá impuesto por los EE.UU. en 1953, luego del golpe de estado por parte de la CIA. Gobernó con una mano de hierro, asesinando y torturando a opositores, tanto los de la izquierda como la derecha, hombres y mujeres.  Su hijo quiere volver a robar las arcas de la nación.

 

Los traidores a Irán, los traidores a los pueblos de Oriente Medio y los traidores a los años de lucha de los pueblos por la libertad contra la opresión sabrán que su traición y su desdén quedarán grabados en la memoria del pueblo iraní y en la historia…

Las generaciones futuras recordarán con vergüenza a quienes se paran sobre los cadáveres de personas indefensas y los pisotean.[2]

 

Mientras estas mujeres que sí se sublevaron contra el régimen y también se oponen a la guerra, en occidente están las feministas burguesas quienes entre macchiato y macchiato piden más ataques contra Irán, para “liberar” a las mujeres. Sólo se acuerdan de Irán cuando un presidente de los EE.UU. o los nazis en Tel Aviv quieren atacar al país. Creen que el depredador sexual quien funge como presidente de los EE.UU. va a luchar por las mujeres. Quizás como lo hizo en Siria, instalando a ISIS.

 

Uno de los primeros a invocar la represión de las mujeres fue nadie más que Netanyahu,[3] un hombre que bombardea a hospitales de maternidad en Gaza matando por doquier a mujeres y niños. Los EE.UU. dijeron algo parecido en Afganistán y varias feministas burguesas salieron a justificar la guerra, ignorando a propósito que sin el apoyo de los EE.UU. el Talibán nunca hubiera existido. Fue Jimmy Carter y luego Reagan quienes comenzaron a financiar a los cavernícolas del Muyahidín y luego los Talibanes, es decir, ellas, las feministas burguesas también.

 

Debo aclarar que muchas de esas feministas no son burguesas en el sentido de clase, no tienen capital, no son ricas, aunque no faltan las que sí. Son burguesas en el sentido ideológico, aunque usan términos como liberal, radical, separatista etc., pero lo que les une es su defensa del capitalismo y la burguesía. Se podría decir feministas de la derecha, pero muchas de ellas les gusta presentarse como progresistas cuando son burguesas o en el caso de las menos ricas, acólitas de la burguesía.

 

Hillary Clinton, una feminista burguesa (tanto en lo ideológico como en el saldo bancario) tiene sus manos manchadas por la sangre de las mujeres de Libia y otras partes es una de las voceras del feminismo burguesa. Por mucho que griten ¡Abajo el patriarcado! Su consigna preferida es ¡Que viva el capitalismo y el imperialismo! Eso incluye a intelectuales feministas como Julie Bindel.  Guardaron silencio frente al genocidio en Gaza y ahora creen que quien critica a la guerra contra Irán apoya al régimen. Me imagino que eso incluye a las presas políticas que no sorben macchiato en sus celdas.

 

Bindel escribiendo en el The Sun dijo que los que critican la guerra apoyan a Irán y la opresión de las mujeres. Repitió las mismas mentiras sobre octubre 7 mezcladas con algunas verdades sobre Irán, pero con el propósito de apoyar la guerra.[4] Bindel ha guardado silencio sobre las masacres de mujeres en Gaza. No apoya a las mujeres de Irán, sino a occidente. Valga decir que el dueño del periódico donde escribe ha apoyado a los gobiernos reaccionarios del mundo, incluyendo los de Gran Bretaña donde Bindel vive. Es un periódico misógino, homofóbico que con frecuencia promueve campañas contra los pobres y los migrantes. Bindel no está sola, Kelly Jay Keen comparte videos del hijo del Shá, quizás para que sepamos que ella apoya la monarquía.[5]

 

Las feministas burguesas, como todo burgués en la práctica suelen ver a otras culturas como inferiores. Usan el mismo lenguaje imperialista para justificar guerras que usó Rudyard Kipling, el autor del infame poema La Carga del Hombre Blanco. Ellas jactan de La Carga de la Mujer Blanca. Valga recordar que Kipling escribió ese poema para pedir y justificar la invasión de Filipinas por los EE.UU.

 

Llevad la carga del Hombre Blanco,
Las salvajes guerras por la paz,
Llenad la boca del Hambre,
Y ordenad el cese de la enfermedad;
Y cuando vuestro objetivo este más cerca
En pro de los demás,
Contemplad a la pereza e ignorancia salvaje
Llevar toda vuestra esperanza hacia la nada.

 

Luego dicen que las guerras son culpa de los hombres y no de su preciado sistema capitalista. Pero una y otra vez, las feministas burguesas piden la guerra. Pero si quieren guerras e invasiones, pues que pidan una invasión de los EE.UU. donde las mujeres son perseguidas huyendo de un estado al otro en procura de un aborto, o donde el acceso a la educación sexual es restringida y deficiente como lo es el acceso a los anticonceptivos,[6] donde las mujeres ganan menos que los hombres y tienen menos representación en una amplia gama de campos.

 

Afganistán es un país donde las mujeres son más reprimidas que en cualquier otra parte del mundo. A lo largo del conflicto en el país, los EE.UU. financiaban al Muyahidín y luego a los talibanes. Tenían la opción de apoyar a organizaciones como la Asociación Revolucionaria de Mujeres de Afganistán (RAWA por sus siglas en inglés), una organización de mujeres que se oponía a los islamistas y también a los rusos y luego a la invasión por los EE.UU.[7] No, entre macchiato y macchiato nuestras queridas feministas burguesas dejaron a los hombres de los regímenes de Carter, Reagan, Bush y Clinton apoyar a los cavernícolas de los Talibanes.

 

Dijeron lo mismo en Iraq. Estoy seguro que más de un lector está preguntándose qué tiene que ver Iraq. Era un país secular, que promovía la educación y la participación de las mujeres. Sin embargo, una de las razones esgrimidas por Bush era el rescate y defensa de las mujeres y comparaba la situación de las mujeres en Iraq con las de Afganistán a pesar de que el gobierno de Saddam promovía la educación de las mujeres.[8] De hecho en Iraq bajo Saddam más de 30% de los profesores de las facultades eran mujeres, entrenadas en Europa y los EE.UU. con financiación completa por parte del gobierno. Hoy en día ya no es así, de hecho, ya no hay un mundo intelectual en Iraq, pues las bombas que pidieron las feministas burguesas pusieron fin a eso.[9] En los EE.UU. las feministas burguesas pagaron para llegar a sus universidades, Iraq promovía a las mujeres como política de Estado, algo que nunca hicieron los yanquis. En Gran Bretaña apenas 31% de los profesores eran mujeres.  Iraq casi les ganaba, pero entre macchiato y macchiato las feministas burguesas pidieron una guerra para mejorar la situación de la mujer en Iraq y, por supuesto, sus portafolios de inversiones.

 

Ahora vuelven a sonar los tambores de guerra y las feministas burguesas se prestan de nuevo para la guerra, a pesar de creer que la guerra es un producto de los hombres y no del capitalismo. No van a analizar su propia participación mientras una refugiada de una de sus guerras les prepara el siguiente macchiato. Como dijeron las presas políticas de Evin quien libera a Irán y las mujeres de Irán es el pueblo de Irán, incluyendo a las mujeres, y no las burguesas con sus macchiatos, vinos y caviar. Ellas son tan el enemigo de las mujeres de Irán como los burgueses machos y merecen el mismo desdén.

 

No faltan voces del mismo Irán pidiendo guerra, y no sólo el hijo del déspota Pahleví. Masih Alinejad es una periodista exiliada. Participó en el movimiento contra el uso obligatorio del hijab (pañuelo o velo) en Irán, entre otras cosas. Hasta allí bien, a diferencia de muchas sí ha luchado contra la opresión de la mujer en el país. Pero en el exilio resultó ser una sionista y además en el primer gobierno de Trump se reunió con el guerrista Mike Pompeo y también trabajó en la emisora oficial de propaganda de los EE.UU. Voz de América, emitiendo programas en farsi.  Ahora critica a Netanyahu, no por bombardear a Irán y matar a civiles sino porque escogió un mal momento. Ella cree que tenía que haber esperado por unas protestas contra el gobierno y atacar en ese momento. Claro, las bombas no iban a caer sobre ella, a salvo en Nueva York.

 

Las que guarden silencio sobre el genocidio de Gaza, no buscan la liberación de la mujer en Irán, sino un reordenamiento geopolítico de la región y la victoria del sionismo. Pero esa consigna no suena bien y convence mejor a los incautos del mundo hablando de los derechos de las mujeres en Irán. Mientras tanto no tienen mucho que decir porque sus gobiernos instalaron y reconocieron a los islamistas de ISIS en Siria. Es un ejercicio de relaciones públicas, mas no una preocupación real por el futuro de las mujeres de Irán. A fin de cuentas, las feministas burguesas, defienden a la burguesía antes que a las mujeres.

 

Fotografía de referencia / Fuente: www.es.euronews.com






[2] Ibíd.,

[4] The Sun (23/06/2025) Stupid ignorant lefties who support Iran when it stones women for adultery are mad and immoral. https://www.thesun.co.uk/news/35536772/support-iran-death-cult-opinion-julie-bindel/

[6] The Guardian (23/01/2025) As Trump returns, state lawmakers pursue bills that would treat abortion as homicide. Carter Sherman. https://www.theguardian.com/world/2025/jan/23/abortion-homicide-bills

 

[8] The New Arab (22/10/2021) Colonial feminism and the un-liberation of women in Iraq. Jyhene Kebsi. https://www.newarab.com/opinion/colonial-feminism-and-un-liberation-women-iraq

[9] Al Jazeera (01/10/2013) The Destruction of Iraq’s Intellectuals. Matthew Schweitzer. https://www.aljazeera.com/news/2013/10/1/the-destruction-of-iraqs-intellectuals


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